sacude la quietud senil de este hospicio
con arlequines y gaviotas.
Marcelo Luna
Marcelo Luna
Y ellos -día sin sol a cielo diáfano- gotean penuria
entonan canciones de niños
desnudan sus cuerpos -en fría ceremonia-
intentan no dolerse
Ellos alguna vez juraron la palabra
vagaron entre recovas
suspendieron un fogón bajo puentes
pasean su divagar por andenes y murallas
Ellos señalados por los transeúntes
de attaché y galería -que burlan la tristeza
de las manos que garabatean silencios-
amanecen en el templo de las orfandades
ante el obligado sopor de la rutina
Elisabet Cincotta
derechos de autor reservados
1 comentario:
Maravilloso poema /social. El cual suscribo con el mismo dolor que fue escrito y sentido por ti.
Besos,amiga querida y admirada.
Migdalia
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