Solo queda enaltecernos
derribar murallas
socavar el día
mirar el espejo
descubrirnos
saber que fuimos
saber que fuimos
que siempre fuimos
si el encanto tiñó oscuridades
obscenos refugios para la mentira
quebrar el hechizo maligno
es necesario
ofrendar mariposas luces de verano
calzar en el grito la talla alegría
más tarde el olvido ceñirá
la cintura de la memoria
es inevitable
que solo quede de nosotros
el embrujo de haber sido palabra
©Elisabet Cincotta
3 comentarios:
¡Qué lindo, Elisabet, es leer tus poemas, siempre, siempre! Tenés el embrujo de la palabra. Gracias.
Jorge Luis Estrella
Y eso no es poco el haber sido palabra.
Bellas tus palabras.Tienen embrujo y serán.
y un abrazo a esa palabra que hubo. Besos Julia
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